Un clavo no saca otro clavo: cómo lidiar con el fin de una relación


Cuando una relación termina, algo en nuestro interior genera un clic y, aunque a veces nos cueste aceptarlo, este quiebre es lo mejor que nos podría suceder. Un clavo no saca otro clavo: cómo lidiar con el fin de una relación.
    ¿Cuántas veces se te vino el mundo encima cuando te diste cuenta de que todo había terminado? ¿En cuántas ocasiones lloraste en tu almohada y por horas en busca de un culpable de tu desgracia? Créelo o no, sin duda a todos nos ha pasado alguna vez. Cada buena historia debe tener un final, aunque muchas veces no es el "vivieron felices para siempre" que en el fondo todos deseamos.

    Para cerrar el ciclo y poder dar vuelta a la página, aquí te dejo algunos consejos con objeto de que puedas lidiar con esta dolorosa, pero fructífera ruptura:

    Deja de lado el resentimiento
    Con esto lo único que generas es rencor en tu corazón, odio hacia la persona que alguna vez amaste y enojo contigo misma por lo que ha sucedido. Las relaciones son de a dos, y las rupturas también.

    Segundas partes en las relaciones, no son buenas
    A excepción de las películas (también en contadas ocasiones) y uno que otro caso particular, las segundas partes solo sirven para reafirmar lo que ya sabíamos: que esto no va a funcionar. Por lo general, serán tres meses de romance, cambios y todo lo que anhelabas, luego de eso todo regresará a la normalidad y tomarán caminos separados.
   
 Contra lo que se cree: un clavo no saca a otro clavo
    Por muy entretenido que suene, no es recomendable comenzar otra relación justo luego de haber salido de una, en especial si ha sido tormentosa. Las bajas defensas y las hormonas sumadas a la necesidad de sentirse amada te harán tomar una decisión que podría llegar a ser incluso peor.

     
Después de la guerra todos son capitanes
    Ten por seguro que la frase que más escucharás será, "Te lo dije", seguida de "Él no era para ti", y una larga lista después. Haya sido bueno o no, ahora ya tienes tu propia opinión al respecto. No dejes que las críticas destructivas hagan ruido en tu corazón.
     
Cuida de ti misma
    No importa qué tan ególatra suene: hay momentos en la vida, como éste, en que debes pensar primero en ti, después en ti y por último... en ti. Busca centrarte en ti misma, realizar actividades que te animen y enfoca tus ánimos en reforzar el amor propio. La vida nos pone pruebas para que aprendamos importantes lecciones, por esto cada vez que encontramos algún obstáculo en el camino debemos sacar a relucir la resiliencia que llevamos dentro y tomar lo mejor de la situación en que nos vemos envueltos.

    Recuerda que la relación terminada es tu pasado, y enseñanzas por obtener para no volver a repetir los mismos errores. Tu ex dejó de ser el amor de tu vida para, tal vez, llegar a ser un buen amigo en el futuro. Lo que has vivido y lo que has sufrido se suma a tus experiencias y te acerca cada día más a alcanzar y mantener una vida plena.
 
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